La cocina peruana se destaca a nivel mundial, esto gracias a
que sus 3 zonas geográficas, costa, sierra y selva, ofrecen una gran variedad de
ingredientes exóticos. Elementos como la quinua, las más de 20 especies de
papa, ollucos, camote o el maíz morado, engalanan platos de inigualable sabor:
papa a la huancaína, arroz chaufa, causa limeña, jalea (no es dulce, son frutos
del mar fritos), lomo saltado, ceviche etc…
En Colombia supimos de la Pollada (ellos la pronuncian “poiáda”)
porque por alguna extraña razón, todos los invitados al programa de Laura Bozzo
habían conocido a su pareja en una de estas.
“-Y donde conocistes (sic) a tu marido?
-yo lo conocí en una pollada, pues señorita Laura…
-que pase el desgraciado!"
Investigación realizada por este medio reveló que además de
ser un menú corriente, la célebre Pollada es el equivalente peruano de las muy
colombianas empanadas bailables: una comida que se vende al público con el
objetivo de recaudar fondos. Asado o frito, el pollo se acompaña con papa,
mazorca cocida o ensalada, servido en plato desechable y acompañado con cerveza
o la tradicional Inca Kola. Es muy común que las polladas de los Pueblos Jóvenes
(equivalente de nuestras Comunas) terminen en pelea, sus asistentes sean
subidos a una Combi de la gendarmería y pasen la noche en una delegación junto
a los tristemente célebres “Pirañitas”. Cualquier parecido con una verbena
popular colombiana es pura coincidencia.